Sin darme cuenta, en uno de estos días, me llegó del fondo de mi cerebro una de las canciones repetitivas de cuando era pequeña, de las primeras, de esas que nunca te cansaban. La música como un juego.
Y me vi tarareando intentando buscar el verso correcto, sus palabras, la rima. Acto seguido, una sonrisa y ese bienestar de cuando juegas y te lo pasas super bien.
Las canciones infantiles potencian el desarrollo intelectual, auditivo, sensorial y motriz . También el habla y los aspectos sociales del niño. La alfabetización, la expresión corporal y la expresión emocional son beneficios que también se logran a través del oído. De modo que jugando con la música y los instrumentos, abriremos un espacio emocional, creativo y de aprendizaje.
Podemos experimentar físicamente con un ruido-ritmo, inventando y creando mundos. Cantar, cantar y cantar. Podemos bailar, dar conciertos familiares y serenarnos escuchando música antes de ir a dormir. O simplemente, empezar con un ruido, que a lo mejor, se transforma en la chispa de una futura vocación. Y no olvidemos que la música en familia es una experiencia compartida fantástica.
En nuestra tienda tenemos una selección de juguetes-instrumento y cajas musicales de gran calidad, porqué creemos que el descubrimiento de esta debe ser especial y afinada, y no un esperpento plastificado que aturda. La música, tanto si se hace como si se escucha, queremos que sea des del disfrute y el juego.
En las primeras edades otra de las maneras para acercarnos al mundo musical, son las canciones tradicionales que se aprenden en la escuela repitiéndose en cada generación. Ya un poco más grandes se irán descubriendo nuevos grupos y artistas para público infantil y familiar.
El ritmo y la melodía que podáis vivir con los pequeños hoy, será un instrumento para toda la vida.